El parto es una de las cosas más dolorosas que un ser humano, es decir, una mujer, puede experimentar. Hay algo sobre ese hecho que parece provocar gran curiosidad en los hombres. En particular, al estudiante universitario Johnny Wade, de Tennessee, quien está decidido a experimentar lo que las mujeres pasan con la ayuda de una máquina muy específica.
La máquina es un conjunto simple de electrodos que se adhieren a la parte inferior del estómago de una persona. Los electrodos están conectados a un interruptor que puede ser programado de uno a 10 (dependiendo de la intensidad que desee la persona). Cuando el video comienza, Wade le dice a un amigo que no lo está desafiando demasiado. “No importa lo que diga, llega a 10.” Con eso, comienza el escándalo.
Aunque sus intenciones eran honorables, el dolor resulta ser bastante intenso incluso desde el principio. A medida que su amigo lo entrena con las técnicas de respiración adecuadas, sus compañeros de clase no pueden dejar de reír. Sin embargo, Wade insiste en que se aseguren de que la máquina pase a los 10. Sin duda, quien está detrás de los controles hace lo que se le pide y Wade grita aún más fuerte. “Eso es 10”, dice mientras todos se ríen. Después de unos segundos de dolor intenso, Wade grita la palabra de ayuda: “¡Piña!”
Tenemos sentimientos encontrados si reírnos del dolor de otra persona o llorar. Pero seamos honesto, este video es hilarante.
Con toda seriedad, tenemos que felicitar al Sr. Wade por crear conciencia sobre la experiencia del parto.
¿Te someterías a estos dolores con la máquina?