12 Peculiaridades Que Sorprenden A Los Turistas Que Visitan China

Es el país con la civilización más antigua del mundo, China tiene una gran cantidad de lugares de interés histórico para ofrecer y tener una buena experiencia haciendo turismo. Podemos visitar lugares como la famosa Ciudad Prohibida, la Gran Muralla y el Ejército de Terracota. Debido a la mayor facilidad para viajar que ofrecen en la actualidad las agencias, muchos eligen este país del oriente, a pesar de que visitar todas sus atracciones turísticas puede ser agotador para el viajero teniendo en cuenta la gran extensión del país.

Para que vayas un poco más preparado si planeas visitar China o simplemente te interesa conocer detalles de su gente e idiosincrasia, te enseñaremos 12 sorpresas que te esperan en este hermoso país.

  • Jamás planees viajar a China durante las fiestas nacionales. En China no existen vacaciones oficiales, y la única oportunidad para viajar es aprovechar los días festivos nacionales. Como podrás imaginar todos viajan al mismo tiempo, y la multitud puede resultar aterradora.
  • Todos los sitos turísticos en estas fechas están llenos de gente. Incluso si tienes suerte de reservar un hotel, no hay garantía de que con tanta multitud, que sabe empujar mejor que tú, puedas apreciar las atracciones locales. Por lo tanto, primero investiga si tus fechas no coinciden con algunas fiestas. Puesto que el calendario local es lunar, 4 de 6 fiestas principales se celebran en distintos días. Sin embargo, puedes descartar de inmediato la primera semana de mayo y la primera semana de octubre (el Día de la Independencia de China), la cual también se llama “Semana de Oro”.

  • Los trenes en China son una excelente manera de llegar donde necesites, pero tienen sus detalles. Es mejor comprar los boletos con anticipación, de lo contrario es probable que no alcances a comprarlos. En los trenes de alta velocidad la diferencia en el precio entre la clase 1 y 2 es mínima y la comodidad es notable, por lo tanto, los boletos de clase 1 se acaban rápidamente. Si te urge viajar pero no hay boletos normales, siempre existe la opción “sin asiento”: tendrías que aguantar un par de horas sentado en el piso.
  • Otro detalle importante. Solo te dejan entrar a la estación de tren si tienes boleto y pasaporte. Tendrás que hacer fila primero para que revisen tus boletos, y luego pasar por un servicio de seguridad. Es algo que debes tomar en cuenta: llega a la estación con tiempo suficiente para hacer todo esto.

  • La ropa de cama entre los puntos de destino no se cambia. Si abordas el tren Shanghái — Chongqing en Shanghái, tendrás una cama recién hecha. Si abordas el mismo tren a mitad del camino, puedes esperar una cama ordenada pero con la misma ropa de cama que se le puso en Shanghái. Es decir, existen en China algunas cosas que es mejor no mencionar para no asustar a los visitantes.
  • El sistema de transporte público en China es excelente. Puedes llegar a básicamente cualquier lugar en autobús. Debes contar con la cantidad exacta de monedas porque no te darán cambio. La única desventaja es que, por lo general, los autobuses y el metro cierran muy temprano. Por ejemplo, el metro en Shanghái cierra aproximadamente a las 22:30 y existe el servicio de taxi que es bastante económico.

  • En China no suelen dejar propinas. Nunca. Ni en el taxi, ni en los restaurantes, ni en los hoteles. No tienen ese hábito. Si te gustó mucho algún servicio, puedes intentar dejar alguna cantidad, pero si después del quinto o sexto intento se niegan, quiere decir que no es el destino.
  • Si los chinos te invitan a comer o a cenar, la probabilidad de que paguen tu cuenta es del 99%. Esto funciona en ambos sentidos. Si tú invitas a un chino, va a esperar que pagues la cuenta por él. También ten presente que los chinos comen a ciertas horas y puede ser que te sea difícil encontrar un lugar para comer fuera del horario común.
  • Debes estar preparado a que nadie hable inglés. Nadie. Ni siquiera en los hoteles. Lo más difícil en chino es la pronunciación: los tonos y los sonidos. Sin esto, nadie te entenderá. Es mejor gastar tiempo en aprender ciertos jeroglíficos (relacionados con la comida) para poder entender de alguna manera el menú. Y descarga en tu teléfono móvil una aplicación que traduzca jeroglíficos chinos.

  • En China no existe Facebook. Al igual que todos los servidores de Google: es decir, el buscador, Gmail, Google Maps, YouTube. Los dueños de smartphones con Android tendrán problemas cargando estas aplicaciones. Por eso o prepárate para un aislamiento social, o encárgate de conseguir el acceso a través de VPN.
  • No todos los hoteles tienen derecho a atender a los extranjeros. En China existe la ley de registro obligatoria de todos los ciudadanos extranjeros, y no todos los hoteles tienen la posibilidad de registrarte. Al reservar tu hotel por Internet, mira atentamente si no tiene la frase “Sólo para residentes de China continental“.
  • En China siempre podrás encontrar agua caliente: en estaciones de trenes, aeropuertos, parques, restaurantes. Esto quiere decir que si tienes un termo, podrás prepararte un té o café o comer unos tallarines rápidos. Es muy práctico para los viajeros que quieren ahorrar.
  • Los chinos son muy amistosos. Esto puede convertirse en un problema, sobre todo cuando preguntas cómo llegar a algún lado. Te enseñarán el camino incluso si no lo saben. Porque de verdad quieren ayudarte, y para algunos chinos sería un equivalente a ”perder la dignidad” no hacerlo. Por eso es mejor que descargues mapas en tu móvil.

 

¿Que te parecieron estos datos de China?