Jack Simpson, de 18 años, contactó a su víctima a través de Facebook en septiembre de 2014. Comenzaron a hablar frecuentemente y un mes después se vieron en persona. En marzo de 2015, cuando Simpson tenía 16 o 17 años y la niña solo 12, tuvieron relaciones sexuales por primera vez.
Simpson sabía la edad de la menor y siguió abusando de ella durante cuatro meses, en la casa de ella, en casa del padre de ella y la casa de sus abuelos.
El 15 de agosto de ese año, la niña se acercó a un hospital a pedir la píldora del día después. Ahí llamó la atención de los trabajadores por su corta edad y avisaron a la policía.
Los policías la interrogaron y arrestaron a Simpson. El fiscal Paul Brookwell dijo:
“Aún sabiendo su edad, ella dijo que la relación sexual con el acusado se inició en marzo de 2015. Esto continuó durante cuatro meses. Ella dijo que la actividad sexual cesó cuando el señor Simpson fue advertido por Servicios Sociales“
Jeremy Coleman, abogado de Simpson, dijo que un informe psiquiátrico demostraba que Simpson era inmaduro para su edad y no entendía las consecuencias de sus acciones en su víctima. Además, Simpson declaró que la relación fue consensuada.
Sin embargo, el juez Jonathan Gibson dijo que la niña era muy pequeña para dar su consentimiento y que Simpson tenía muy claro el delito que estaba cometiendo mal.
“Tu sabías que la víctima tenía 12 años durante el periodo que estuviste con ella y sabías que no era correcto tener sexo. Aunque la pequeña diga que lo hizo con su consentimiento, la ley protege a los niños de mantener relaciones sexuales cuando no tienen la madurez para tomar esa decisión”
-Jonathon Gibson-
Simpson fue declarado culpable y sentenciado a 12 meses a un instituto para jóvenes delincuentes.
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