Según los estándares y estadísticas de nacimientos en EEUU, los bebés que nacen con un peso superior a 3.6 kg están fuera de la escala de lo que se puede considerar saludable. No vas a creer la sorpresa que se llevó esta mujer cuando después de sobrellevar un embarazo muy complejo debido al tamaño de su barriga, dio a luz a una bebé de casi 6.3 kg. Sí, tal como leíste.
Esta valiente madre se llama Christine Corbitt, y aunque ya era madre de dos hijos, asegura que este parto fue extremadamente doloroso. Obviamente, la no tan pequeña Carleigh Brooke Corbitt tuvo que venir al mundo a través de cesárea programada.
Este insólito caso se viralizó en cuestión de días en los Estados Unidos y como era de esperarse, reabrió el debate sobre ciertos tipos de alimentos procesados y el efecto que tiene en nuestros genes. Afortunadamente, la recién nacida está perfectamente bien de salud, su peso rebasa los estándares a nivel mundial.
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