Tiahleigh Palmer, o simplemente Tiah, era una colegiala australiana de 12 años que sufrió un destino atroz a manos de quienes, se suponía, debían cuidarla.
Fue asesinada en el pueblo de Beenleigh, Australia, por su padre adoptivo en octubre de 2015 luego de ser violada durante más de 10 meses por su hermanastro, de 19. ¿La razón? ambos creían que estaba embarazada.
El cuerpo de Tiah fue encontrado desnudo en un río al mes siguiente, en noviembre de 2015.
Rick Thorburn, su padre adoptivo, la mató para cubrir a su hijo Trent y así evitar que fuera a parar a la cárcel por abuso sexual e incesto (pese a que no eran hermanos de sangre), lo que le acarrearía una sentencia de por vida según las leyes australianas.
Según Thorburn, dejó a Tiah en su colegio la mañana del 30 de octubre y no supo más de ella hasta que se encontró su cuerpo descompuesto en un río. Si bien esta versión no ha podido ser corroborada, investigaciones confirmaron que había sangre de la niña en su auto.
Joshua, el hijo mayor de 20 años (en la foto), y su madre, Julene, enfrentan cargos de obstrucción a la justicia y falso testimonio.
La Corte tuvo acceso a una conversación via Facebook de Trent con un amigo, en la que éste le confesaba que creía que Tiah estaba embarazada.
Este caso ha llevado a la sociedad australiana a revisar su sistema de adopción para, en un plazo de seis meses, prevenir que casos horrendos como éste ocurran en el futuro.
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