Una mujer admitió haber pedido a hombres en su trabajo y por Internet que violaran a su hija de 10 años, que fue descubierta desmembrada en la bañera de la casa que compartía con ella en Albuquerque (Nuevo México), a finales de agosto.
Según revelaron las pericias policiales, la menor fue drogada con metanfetamina, violada y estrangulada antes de que le fueran amputadas la pierna izquierda y ambos brazos.
El cuerpo de la niña, llamada Victoria, fue hallado luego de que los vecinos indicaran que desde la vivienda se veía salir humo y se oían fuertes gritos. Al entrar, la policía descubrió los restos de la menor envueltos en una manta que se estaba quemando.
Ha sido esta semana que su madre, Michelle Martens (35), ha reconocido que había contactado a hombres a través de Internet y en su trabajo para que violaran a su hija, posterior a lo cual habría mantenido encuentros con al menos tres. Uno de ellos, Fabián Gonzales (31), fue detenido junto a la mujer el día del hallazgo.
El diario Albuquerque Journal indicó que Martens habría declarado a la policía que “disfrutó observando” el asesinato.
“Este homicidio es el más horroroso que he visto en mi carrera”, dijo en agosto Gorden Eden Jr., miembro de la policía de Nuevo México en servicio durante el descubrimiento, “porque evidenció un total desprecio por la vida humana y la traición de una madre”.
Tanto Martens como Gonzales enfrentan cargos por los delitos de abuso contra menores y homicidio.
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