Richard Dubiel es un hombre de 75 años, muy activo para su edad. Richard quien estaba acostumbrado a reparar todas las cosas de su casa, no lo pensó dos veces en subirse al techado cuando vio que este estaba teniendo problemas de filtraciones.
Pero su cuerpo no es el mismo de antes, tras tres meses de arduo trabajo, subiendo y bajando escaleras le pasaron la cuenta, sus rodillas le empezaron a doler, sus manos se estaban cubriendo de callos, pero el seguía trabajando.
Hasta que su vecino David, presencio la situación de su vecino, quien quedo asombrado con el actuar del hombre. David fotografió al vecino y la subió a Facebook, pidiendo la ayuda de los maestros techadores de la zona.
Increíblemente la acción del vecino tuvo sus frutos, y es que esa imagen fue compartida miles de veces, logrando reunir un grupo de voluntariados que decidieron darle la ayuda al anciano que tanto necesitaba, ¡de forma gratuita!
Al Sábado siguiente los muchachos se reunieron en la casa de David, con toda la maquinaria necesaria para realizar un trabajo profesional. Le pidieron a Richard que simplemente se sentara a observarlos trabajar.
¡Para la hora del almuerzo el trabajo ya esta realizado!, el anciano muy dichoso miraba desde su patio el nuevo techo, agradecido de la voluntad del grupo de colaboradores.
Le pidieron a Richard que simbólicamente colocara la ultima teja, quien sorprendido y emocionado subió hasta el tejado a terminar el trabajo en de la comunidad. Y es que no esperaba tanta bondad de sus vecinos.
Dándoles las gracias, aún emocionado… el les dijo: “Ustedes me acaban de devolver la fe en la humanidad”.
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