Los niños son tiernos y graciosos. Los animales son tiernos y graciosos. Si los juntas, ¿qué obtienes? ¡el doble de ternura y carcajadas!
Si no me crees, mira la charla que sostienen esta bebé y esta cabra. A ratos parece que estuvieran discutiendo muy airadamente y–como si fuera una charla política- tratando asuntos muy serios pero por más que pones atención te das cuenta que no entendiste nada.
Sólo sé que visto desde afuera está muy hilarante:
¿Te gusto? ¡Compártelo clickeando abajo!