La sartén puede ser uno de tus mejores amigos de la cocina, con ella puedes preparar los diferentes platos que te imagines, pueden ser recetas saladas y saludables como wraps, desayunos, también ricos postres sencillos de hacer como tortas, y también usarla para los ricos salteados, revueltos o tortillas.
Y la dificultad es cuando nos toca limpiarla, ya que a medida que se va usando va formando capaz indeseables y sus fondos se van pegando y va siendo cada vez mas difícil de quitar, pero todo esto lo puedes solucionar con una patata!!! De manera rápida y sencilla en 3 simples pasos.
Atrévete a usar este truco y veras como tu sartén queda como nueva
Materiales:
Media patata o papa
Sal gruesa
Unas gotas de aceite
Procedimiento:
- Coloca un puño de sal gruesa en el sartén
- Corta una papa por la mitad y friega con ella sobre la sal, haciendo en forma de círculos
- Enjuaga la sal, seca la sartén y cubre con una fina capa de aceite de modo de protegerla hasta su próximo uso.
Ahora preguntarán… ¿por qué una patata?
La sal gruesa se recomienda normalmente para limpiar este tipo de utensilios además de ollas de hierro, pero la papa no es tan común como truco. La humedad de la papa cruda, en reacción con la sal gruesa, hace una exfoliación fuerte que es capaz de despegar la grasa, inclusive la quemada, del metal.
Además es muy buen truco para quitar el óxido
Puede usar esta misma técnica para retirar manchas de óxido, ¡usa en lugar de la sal el bicarbonato! Solo toma en cuenta que en una sartén que ha estado oxidada no es aconsejable volver a cocinar, pero puedes hacerlo en otros muchos objetos de tu casa.
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