Las abejas robóticas ya son una realidad. Científicos de la Universidad Politéncica de Varsovia acaban de crear el primer drone en miniatura capaz de polinizar de forma artificial, cumpliendo el mismo papel que los cada vez más escasos insectos.
El pequeño robot volador puede encontrar una flor masculina, recoger su polen y luego transferirlo cuidadosamente a la femenina para fertilizarla. Su creador, el ingeniero polaco Rafel Dalewski, ha asegurado que el insecto robótico ha sido probado exitosamente en el campo, y que su capacidad de polinizar “se ofrece como una esperanzadora alternativa para hacer frente a la reducción constante de la población mundial de abejas”.
“El pasado verano hicimos la prueba y ya tenemos la primera semilla obtenida a través de esta polinización artificial, por lo que queda demostrado que nuestro robot puede hacer casi lo mismo que las abejas reales”, detalla.
Además, Dalewski aclara que este biodrone “no pretende sustituir a los insectos, pero sí ayudar a su labor y complementarla”, especialmente luego de la preocupante alza en la mortalidad de insectos polinizadores.
Estos insectos, de quienes dependen el 75% de los cultivos del mundo, están muriendo a una tasa el doble de lo normal gracias a la contaminación, el calentamiento global y los agrotóxicos.
Según un estudio realizado en la Unión Europea entre 2012 y 2013, que analizó más de 30 mil colmenas y las prácticas agrícolas a su alrededor, los índices de mortalidad alcanzan hasta un 33,6%, más del doble de lo normal.
Las consecuencias de la desaparición de las abejas sería catastrófica. De hecho, si las abejas se extinguen, probablemente la especie humana no tardaría mucho más en desaparecer.
Mira este video para saber más sobre la importancia de las abejas:
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