Ya se ha comentado que el hecho de que perros y gatos no pueden ser amigos y son los eternos enemigos es todo un mito. Hemos sido testigos de casos maravillosos en los que pueden llegar a ser los mejores compañeros de vida, sin ningún inconveniente.
Este video nos muestra a un gato y a un perro que, definitivamente, no se llevan mal para nada. Su relación llega a ser envidiable por lo relajados que se encuentran uno al lado del otro y lo tierno y cariñoso que es el gato, con el que parece ser su gran amigo.
Comparte este video con tus amigos, es una imagen preciosa.