Esta es una historia que te dejará una gran lección. Para los que a veces se sienten incapaces de poder hacer algo, quedara más que claro que no hay excusas cuando se tiene el deseo y disposición. El primero de los amigos, Haixia nació ciego de un ojo pero perdió el otro en un accidente laboral. Mientras que Wengi quedó sin sus dos brazos en otro accidente.
Pero esto no significó la total incapacidad de estos hombres, sino que se propusieron una tarea que contribuiría de alguna forma para proteger su tierra. Juntos llevan alrededor de 10 años sembrando árboles en la localidad de Yeli, un pueblo al noreste de China.
Haixia y Wengi arrendaron más de 3 hectáreas de tierra al gobierno.
En 10 años ya han sembrado más de 10 mil árboles.
Ambos perdieron partes de su cuerpo en accidentes.
Ellos formaron un equipo que protegería el suelo la erosión.
Han afirmado que han sembrado más de 10.000 árboles en una década.
Dicen que se levantan a las 7 am para comenzar su trabajo de reforestación.
Ellos plantan esquejes de árboles usando una técnica muy especial.
Haixia a pesar de ser ciego se sube a los palos para cortar los esquejes. A él también le toca hacer los hoyos.
Ambos se combinan para hacer cotidianamente esta tarea que ya llevan haciendo hace más de diez años, al noreste de China.
Son un excelente ejemplo de amistad en las peores situaciones de la vida.
Si bien, ellos no están en su mejor momento físicamente hablando, esto no les impide poder hacer algo bueno incluso por los demás y por el planeta. Es una buena demostración que el humano puede hacer o continuar haciendo actividades útiles en bien de su sociedad. Y porque no inspirar a más de uno a seguir sus caminos.
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