Si te decían “En tres meses más” eso significaba mucho más de tres meses.
Crecer con brackets siempre ha sido algo complicado. No es natural tener la boca llena de fierros sólo para que tu mordida no se transforme en una pelea de dientes. Por eso no quedaba otra que tener que ponérselos. Todo sea por tu salud bucal. Y si fuiste blanco de burlas en tu escuela, o sufriste cada vez que tenías que comer o tener que esperar eternamente para que te los sacaran, entonces entenderás lo que significan las siguientes imágenes:
Paso número uno: el suplicio.
Cuando te hacen una pequeña demostración de lo que será tu infierno en los próximo años
El ritual post comida
Cuando hablabas y no se escuchaba como tu querías que se escuchara
Lo que sentías cuando un fierrito te rozaba la mejilla
Tu mejor compañera
La decisión más importante de tu vida: escoger el color.
Sentir que ibas a perder tus dientes al dar una mascada después que visitar al dentista para que los ajustara
Cuando te mueres de hambre pero te duele más comer
El arte de comer todo lo que te prohibieron porque se te podía romper un bracket
Cuando se te soltó uno y debías decirle a tus papas
El dolor gráfico
Aquellas noches que no pudiste dormir porque te dolían los dientes
Tu cara cuando le mentías al doctor de qué tan seguido usabas tus elásticos
Cuando te decía “en tres meses más los removemos”
Y cuando finalmente llegó el día en que por fin te los iban a sacar
Y por fin podías volver a sentir tus dientes
Para volver a enfrentarte a tu nueva tortura…
¿Te sientes identificado/a con estas imágenes? ¡Coméntanos!
