La ira es uno de los sentimientos más difíciles de controlar. Requiere de un gran autocontrol, y por eso los niños protagonizan rabietas, ya que por su corta edad aún no han aprendido a manejar su rabia y canalizarla de una forma sana.
La caja de la rabia
En el libro Vaya Rabieta, la ira de Roberto de 3 años se transforma en un monstruo rabioso que rompe todo a su paso. Cuando el niño logra reaccionar y reparar el daño, se hace más y más pequeño hasta que puede caber en una caja.
Esta analogía, es comprendida con facilidad por los niños, y por eso Marina ha creado la Caja de la rabia, una técnica de relajación para niños de entre 3 y 6 años.
Debemos trabajar la idea de que la rabia que sentimos, puede sacarse de nuestro interior y plasmarla en un papel. Por ello, cuando se enfaden, invitaremos a los niños a dibujar el monstruo que sientan.
Una vez calmados, arrugarán esa rabia y la depositarán en una caja cerrada, para que así no pueda volver a molestarlos.
Te sorprenderás al ver que los monstruos de la rabia toman formas y colores muy distintos según el niño o el detonante. Pero en cualquier caso esta técnica les ayuda a relajarse y retomar el control.
Nos encanta la caja de la rabia, pues es una técnica no invasiva, que no trata de cambiar sus comportamientos, sino que les entrega las herramientas para resolver una situación desagradable y recuperar la calma.
¿Te gustó la técnica?
