Francy Uribe, es colombiana y desde los 9 años tenía claro que no quería tener hijos. Criada en una familia machista, Francy aprendió desde muy pequeña que si quería lograr sus metas en la vida tendría que luchar conseguirlo. A los 16 años abandonó pueblo donde nació y comenzó una nueva vida.
El día en que todo cambió fue cuando le dijo a su padre “quiero ser periodista y no voy a tener hijos”.
Francy Uribe nació en una finca cafetera y se crió en un típico hogar latinoamericano. Desde muy pequeña aprendió a cocina, a realizar las tareas de la casa y ayudar con el procesamiento del café. A los 16 años abandonó su pueblo y comenzó a emprender un viaje que la levaría a lograr sus metas.
Como no tuvo el apoyo económico de su padre, se las arregló fabricando aretes, collares, y otras cosas de ese tipo. Gracias a sus ganancias, podía pagar sus estudios de Comunicación.
Con el tiempo apareció el primer chico que le movió el piso. Quedó embarazada y ella “sin dudarlo ni un solo instante abortó”.
Francy continuó con su vida,y después de terminar su carrera se fue a la capital (Bogotá). En esta ciudad inició su carrera como comunicadora y luego de ahorrar por mucho tiempo, realizó su sueño de viajar por el mundo. “En un año llegué a salir siete veces”, comentó.
“Estaba feliz, era ese momento justo en el que la mente, los deseos y el destino alinean para materializar lo que sueñas”. Francy a Univisión
Después, llegó la época en la que muchas de sus amigas se casaron y tuvieron hijos, pero ella siempre dejaba en claro que no estaba interesada, pero ellas le decían que “ya te darán ganas“. Y el día menos pensado… el amor volvió a golpear su puerta.
La relación se tornó seria y decidieron vivir en Chile, pero antes de mudarse, Francy le informó sobre la decisión que había tomado hace años:
“Bueno quiero que sepas que yo no quiero tener hijos, así que antes de irnos, me operaré para no tenerlos”. Francy a Univisión
El día que se iba a realizar su procedimiento, se enteró de la “historia” de 9 mujeres que estaban en esa sala de operaciones por el mismo motivo de Francy. “Unas me felicitaron, otras destacaron mi fortaleza, pero nadie me juzgó o criticó”, afirmó.
Luego de 5 días de la esterilizarse, preparó sus maletas y se fue a Chile.
Lamentablemente para ella, su pareja comenzó a comentarle sobre su idea de tener un hijo, aunque había aceptado que Francy se hubiese esterilizado. Los meses transcurrieron, y su novio se fue por un tiempo a Francia. Regresó con una actitud muy desagradable y optaron por terminar la relación.
Ya han pasado 6 meses de su ruptura amorosa y Francy confiesa cuán feliz se siente:
Me miro al espejo y me siento bella, llena de energía, sexy, y sobre todo, feliz de saber que las mujeres tenemos múltiples formas de ser y estar en el mundo y que fui capaz de escoger y mantenerme en una de esas opciones. Me encanta decir con todas las fuerzas de mi corazón que no quiero hijos y que me operé para no tenerlos, eso frena la fastidiosa respuesta de “el chip se te va a despertar”. Me encanta ser la tía loca que mis sobrinos llaman y escriben para conocer de sus aventuras. Pero, también me caen bien las mujeres que decidieron tener hijos, admiro su valentía y siento una gran admiración por ellas, un gran respeto porque también tomaron una opción de vida. Francy a Univisión
¿Qué opinas de la decisión de Francy?
