Nicu Helping Hands es una organización que rehace los vestidos de novia y los convierte en hermosa ropa de entierro para bebés que han fallecido. La organización está compuesta por más de 700 costureras que pasan largas horas, meticulosamente en cada vestido para transformarlos en trajes parecidos a un vestido de bautizo.
Estos, cariñosamente llamados “trajes de ángel,” se les dan a los padres que perdieron a sus bebés antes del nacimiento o muerte neonatal. ¿Cómo logran que este costoso proceso sea posible? Con costureras que trabajan de forma gratuita, con mujeres que donan sus amados vestidos y las miles de personas que apoyan a Nicu Helping Hands.
“Cada vida que se forma… toca el mundo en alguna manera pequeña para la eternidad.”
El envío, embalaje y todos los costos relativos son cubiertos por personas que quieren compartir su amor a los afligidos padres y el angelito que han perdido.
Vestidos especiales del día más feliz de una novia para consolar a una madre durante su día más triste.
Las costureras que dan su tiempo y su corazón para ayudar a padres en su duelo.
“Este niño que es tan amado por sus padres, se envuelve en amor por una novia.”
La organización ha alcanzado su objetivo de donación tan sólo unas semanas después de anunciar su ciclo de donaciones. “El dolor no es un momento o un acontecimiento, es un proceso, y uno largo y difícil”, explica Grubbs. Pero con las personas que se preocupan, los afligidos padres sabrán que no están solos.
También puedes ayudar, compartiendo esto y dando a conocer esta noble causa.