Muchos de nosotros evitamos comer las semillas de las sandias, ignorando los múltiples beneficios que ellas nos pueden ofrecer, lo cierto es que poseen propiedades que pueden ayudar a nuestro cuerpo para muchas cosas.
Descubre todas sus ventajas y una receta imbatible que permitirá aprovechar al máximo todos sus nutrientes.
Beneficios de la semilla de Sandía
La forma más sencilla y común de consumir la Sandía es cuando comemos la fruta, masticando las pepitas para romper su cáscara. Ayudando con esto a que los jugos gástricos puedan aprovechar los nutrientes internos.
Las pepitas ayudan a reducir el riesgo de sufrir estreñimiento y hemorroides ya que en ella hay mucha fibra vegetal lo que ayudara a mejorar nuestro transito intestinal.
La citrulina es un importante aminoácido que contiene esta semilla y que tiene gran poder antioxidante y evitara el envejecimiento prematuro de la piel y los tejidos, además es un gran regulador en el ciclo de la urea, favorece la excreción de residuos, mejora el rendimiento en el deporte y reduce la fatiga muscular.
Todos estos beneficios aunados a las fantásticas propiedades hidratantes y refrescantes que contiene la pulpa de la Sandía.
Cómo consumir semillas de Sandías fuera de temporada
Si quieres consumirlas fuera de la temporada regular o no te gusta su textura te recomendamos elaborar infusiones o consumirlas diluidas en leche o zumo.
Esta preparación la puedes hacer de la siguiente forma:
- Extiende las semillas en una bandeja para horno y caliéntalas a 160 ºC: espera que se sequen por completo y sabrás que están listas cuando desprendan un suave olor dulce y estarán tostadas.
- Pásalas por un mortero: o picadora hacerlas polvo, guárdalas en un bote de cristal en algún lugar fresco y seco.
- Sírvelas en una proporción de 1/10
¡ Y listo! A disfrutarla
Disfruta y comparte de esta increíble receta con tus amigos!