Cuando Sara Nozaki y Grant Olson adoptaron a un gato abandonado, ahora llamado Wilbur, no tenían idea de que realmente habían encontrado a una persona pequeña atrapada en el cuerpo de un gato. La pareja descubrió al poco tiempo de adoptar a Wilbur que este tiende a sentarse igual que un ser humano.
“Grant estaba revisando los avisos en un periódico de la ciudad de Nueva York, cuando encontró un mensaje con la foto de Wilbur que decía: “¿Este gato no pertenece a nadie?”, comentó Nozaki. “Grant dijo en tono de broma: bueno, si no pueden encontrar a su dueño, yo estoy dispuesto a quedarme con el” y dos días más tarde lo hizo.
1.- Cuando Sara y Grant adoptaron a Wilbur prensaron que era un gato callejero común y corriente.
2.- Sin embargo, pronto notaron algo bastante extraño…
3.- ¡Wilbur se sienta exactamente igual que una persona!
4.- “Creemos que su columna es anormalmente larga o sus patas son muy cortas, como sea, para nosotros es adorable”
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