Stuart es un pequeño cachorro con ciertas dificultades para enfrentar la vida. Es ciego y también sufre de un posible defecto de la columna, lo que significa que cuando anda parece un tierno y juguetón conejito. A veces sus patas traseras se le doblan, está perdiendo la cola y su dueño anterior intentó ahogarlo para deshacerse de él; sin embargo, a Stuart nada le quita el entusiasmo por vivir.
Denise Mueller inmediatamente sintió una conexión con Stuart después de ver el post de Facebook. Ella se sorprendió de que nadie respondiera al llamado de ayuda, ya que la publicación incluía a otra perrita que recibió decenas de ofertas de futuros hogares adoptivos, por lo que se contactó con el autor de la publicación y preguntó qué pasaría si nadie lo adoptaba.
Denise no podía adoptar a Stuart pero intentó encontrarle un hogar mientras ella lo cuidaba de forma provisoria. Días después recibió una llamada del centro de rescate Last Call K-9, con sede en California, comprometiéndose a apoyar a Stuart.
Cuando Denise lo recogió, el propietario actual le dijo que él había llegado a pensar en ahogar a Stuart porque “sabía que había algo mal en él“. Afortunadamente, los hijos del hombre lo detuvieron y Stuart se fue a casa con Denise, que ya se había encariñado con el pequeño.
“Stuart estaba muy asustado cuando lo recogí“, dijo Denise. “El hombre de la casa me explicó que lo único que hacía era caminar en círculos y morder.” Se notaba que estaba extremadamente ansioso, pero a los pocos días de llegar a su nueva casa de acogida, se había convertido en un perro completamente diferente.
“Él tiene un buen comportamiento. A pesar de todo con lo que ha tenido que lidiar, nunca se queja“, dijo Denise. “Es muy juguetón y está feliz.”
Sin embargo, la ansiedad de Stuart no ha desaparecido, especialmente cuando se enfrenta a un nuevo entorno. Pero ha demostrado ser muy valiente, y no le teme a los nuevos desafíos que le presenta la vida. Le encanta jugar con su gigantesco perro de peluche y otro de carne y hueso.
Stuart es un cachorro que necesita de cariño, el que retribuye con una dulzura inimaginable. Pero ahora, el obstáculo que debe superar es encontrar un hogar donde pueda ser aceptado con todos sus defectos y virtudes. Stuart está comenzando a vivir y merece una segunda oportunidad con personas que realmente lo quieran.
Si está interesado en adoptar a Stuart, puedes contactarte con Last Call K-9 para iniciar el proceso.
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