Las gatas son cocidas por tener un fuerte sentido protector cuando se trata de sus crías. Desde el momento en que saben que ocurrirá el parto, las gatas buscan un refugio donde tanto ellas como sus crías estén a salvo. No solo buscan con dedicación el lugar ideal sino que también pueden demostrar una actitud más agresiva frente a cualquier desconocido.
Este video nos muestra la gran amistad que puede existir entre un gato y un perro, reflejada en esta pareja de amigos que vive en la calle pero que, por circunstancias de la vida, dejaron de verse y ahora se reencuentran. Sin embargo, la gata ya no está sola y tiernamente le va presentando a sus crías como una madre muy orgullosa.
Comparte este video con tus amigos, quién dijo que perros y gatos no podían ser amigos.