Para mantener un hogar saludable, no sólo debemos limpiarlo frecuentemente o ventilarlo, sino que también tenemos que deshacernos de ciertos focos de riesgo donde crecen y proliferan bacterias.
La basura y los desperdicios son algunos de los focos más evidentes, pero otros no lo son tanto. Así que para que tengas ojo, acá te mostramos 13 cosas que deberías revisar para ver si es hora de que se vayan al tacho.
1.El cepillo de dientes
Usualmente botamos el cepillo cuando está dañado por el uso, pero en realidad debemos cambiarlo cada tres meses o justo después de pasar una gripe o una infección, para evitar recaídas.
2.La almohada
Seguramente cambias las sábanas y las fundas seguido, pero lo que no sabías es que las almohadas se deben cambiar cada 3 años para no poner la cara en una generosa fuente de ácaros, polvo y bacterias.
3.La esponja del baño
No sólo junta nuestra piel muerta y nuestra suciedad, sino también es buen hábitat para microorganismos y moho, por lo que o bien la botas para siempre y te duchas de otra forma o la cambias cada 3 semanas.
4.El lentillero
El 40% de las personas que usan lentes de contacto o lentillas, han tenido algún tipo de infección ocular y en general no es porque no cambien el líquido o las lentillas: el problema es el lentillero.
Dado que lo tocamos con las manos sin lavar y andan dando vuelta por la casa o la cartera, es fácil traspasar infecciones a nuestros ojos, por lo tanto debes cambiarlo cada 3 meses o lavarlos con jabón seguido.
5.Labial
Al entrar en contacto con nuestra piel, al igual que el resto de los productos de maquillaje, juntan microrganismos nocivos. Deben tirarse cada dos años.
6.Colorete
El colorete debe reemplazarse antes de los 18 meses.
7.Esmalte de uñas
No debes tener el mismo pintauñas por más de un año.
8.Sombra de ojos
Al igual que el esmalte, no deben pasar 12 meses sin cambiarlo.
9.EL rímel
No debe pasar los 3 meses de uso.
10.El delineador
Si es de tipo brocha, tíralo cada 3 meses. Si usas un lápiz, basta con sacarle punta con un sacapuntas bien limpio.
11.Sartén dañada
Debes tirarla apenas notes que el revestimiento de teflón se empiece a arañar ya que sus restos se terminarán añadiendo a tu comida y, si bien no son tóxicos, tampoco son comestibles.
12.Los paños de cocina y las esponjas
Una vez al mes es el plazo para estos elementos que están en contacto con toda la contaminación en la cocina.
13.La ropa vieja que usamos para estar en la casa o de pijama
Las prendas que pasan mucho tiempo sobre nuestra piel, a pesar de los lavados, son susceptibles de contaminarse con el tiempo. Si observas que las fibras se han pasado o si la prenda empieza a oler al poco rato de usarla, es porque un grupo de microorganismos vive en ella y se reproducen con la humedad y calor de tu cuerpo.
Así que ya sabes, ¡a renovar tu casa!
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